HERIDAS Y CICRATICEZ
(No falto mucho para que la ayuda llegase a la casa del japonés, entrando a la casa).
-El ingles acompaña al los pequeños en la habitación donde se encontraba su padre-
Señor Arthur, crees que mi padre se pondrá bien? -mirando al ingles con preocupación y miedo el pequeño-
No te preocupes Inu, como te dije hay que ser paciente en este tipo de situaciones, como también valientes -le sacude el cabello, pero se queja un poco del dolor que tenia sobre algunas heridas que ya estaban empezado a ser una molestia-
Más bien deberías aconsejarle de que debe ser más precavido cuando se trata de enfrentar a este tipo de situación y no cometer tonterías como hacerse el valiente -entrando a la habitación, un joven pelirrojo, que con su tono de voz hace que la habitación entre en un momento de silencio-
Irlanda!-volteando a ver quién era el que había llegado- llegaste justo a tiempo-mostrando una leve sonrisa de alivio-
Cuando me llamaste me explicaste lo que sucedió, pero la verdad, no me imagine que la situación fuese tan grave -mira al ingles y a los dos niños- quien son eso dos-intrigado por ver aquellos pequeños en la habitación-
Ellos dos son los hijos de Japón, Inu y Hion -presentándoselos a su hermano, nota la mirada de miedo y de susto del pequeño- Inu tranquilo el vino a ayudar a tu padre, puedes confiar en él.
el irlandés, se acerca al pequeño albino y le mira fijamente- se ve que tienes fuerza, no te preocupes yo me encargare de tu padre eh visto peores caso, así que te fe. El estará bien lo dejare como nuevo -le sonríe-
nana-cubriéndose con la manta que tenia se tapa el menor y observa al otro sonrojado, con ojos soñadores, ese momento el irlandés al ver esos ojos sintió como si ese niño supiera sus intenciones, como si se hubiera creado un enlace el al ver cruzado mirada entre ambos-
Nana? -el mayor se quedo sorprendido de que las primeras palabras de su hermano fuera esa, mas si fuese dirigidas a un total desconocido- que cosas estás diciendo hermanito, el no es nana, el no puede serlo es un desconocido
Pues parece que para él no lo soy -se le acerca más y acaricia la cabeza del menor, y este le responde cogiendo con ambas manos pequeñas el dedo pulgar del irlandés y mostrando una sonrisa- que niño tan agradable -le responde con una sonrisa-
Nana -el menor se sonroja más al ver la sonrisa del otro y se esconde en el regazo de su hermano mayor, pero aun mantenía su vista al irlandés
Bueno, veamos qué podemos hacer por tu padre -se acerca al japonés, observando las múltiples heridas y la más grave que tenía en el pecho que no dejaba de sangrar , pone su maleta y la abre sacando varios implementos médicos, comienza a curarles las heridas que podía-
-los pequeños los observaban lo que el otro hacia, el mayor se sentía incomodo el tener a ese sujeto cerca de su padre, mientras el menos solo mantenía su mirada en irlandés no lo perdía de vista mostraba era una gran curiosidad-
-mientras el irlandés atendía al japonés, Arthur se a recuesta en una de las paredes de la habitación se queja un poco del dolor, eso hace que el otro interrumpa su trabajo, le voltee a ver-
En cuanto termine, te curare también -mirando a su hermano, notando que también estaba herido, noto que las heridas de japonés estaban sanadas, pero el dolor persistía en el interior del japonés, esto complico la situación para el irlandés, ya que jamás había visto tantas heridas múltiples y un dolor tan persistente, pero mas era el ver rostro del japonés sufriendo incontrolablemente, el verle sentía una fuerte compacion y una atracción hacia ayudarle- no se preocupes, se que no me conoces pero haré todo lo que este mi alcance para que ese dolor y sufriente desaparezca -acariciando el rostros, vuelve a acercase a su maleta para sacar algunos frasco un tanto extraños y muy curioso-
Qué cosas son esas? -Inu pregunta con bastante curiosidad- como pretende darles esas cosas a mi padre? y para que le serviría? -teniendo mucha curiosidad-
je! créeme se puede ver raros esas posiciones y saber a horrendo, pero es uno de las especialidades de mi hermano -sonriendo el ingles, observando los envases que su hermano había sacado para quitar el sufrimiento al japonés-
Pociones?-aun con curiosidad, pero con muchas dudas y aun observando lo que el otro pretendía hacer-
Si que será un tanto complicado, que no se queda quieto, entubarlo no sería una opción ahora -le mira y muestra una sonrisa- se que este método no es nada técnico, será un tanto incomodo, pero que disculpe por ello -toma uno de los frasco, lo abre y bebe, dejando el contenido dentro de su boca.
-Sujeta el rostro del japonés, se aproxima a tocar los labios con suma suavidad los abre con un beso, ingresando el contenido de la bebida el japonés intenta resistir, el ingresar aquello le quemaba la garganta sujeta el frente de la camisa del Irlandés y medio abren sus ojos viendo las imagen del Irlandés.
El irlandés le muestra una sonrisa, notando que estaba funcionado su poción con el japonés- se pondrá bien Señor Japón no se preocupe está en buenas manos, de eso se lo puedo asegurar -nota mejoría en el cuerpo del japonés-
Después de este desastre el irlandés iba más de seguido a la casa de Japón para ver su mejoría en su salud y el cuidar a los niños algo que le agradaba bastante. Del cual se notaba el full interés por tener una relación fija con el japonés pero que este no se desidia por el hecho de aun estas sintiendo algo por Arthur, cuatro meses después sucede la boda de Alfred con Arthur, algo que desbasto por completo al japonés y que lo hizo encerrarse más en no creer más en un sentimiento como lo es el amor, pero después Irlandés lo convenció de que se diera una oportunidad de creer en el amor, del sentimiento que él quería compartir con el japonés.
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